domingo, junio 25, 2006

¿Qué podría remediar las calamidades humanas?

La locura
Si reflexionamos un poco sobre los males que afligen a la humanidad, veríamos que son innumerables :
- El nacimiento es inmundo
- La juventud transcurre entre desvelos, vaguedades y estúpidos requisitos escolares
- La madurez está ligada a las obligaciones y compromisos sociales, bueno, en realidad toda nuestra vida
- La vejez está expuesta a toda clase de vejaciones como el abandono, la dependencia a, etcétera.
-Y como coronación... La muerte
Veríamos además las enfermedades que nos acechan, los accidentes que nos amenazan, y transtornos que amargan los momentos más hermosos.
Sin tomar en cuenta, lo que el hombre produce al mismo hombre, como la pobreza, la prisión, la deshonra, humillación, la vergüenza, la tortura, y muchas otras.

Erasmo de Rotterdam quien escribe sobre esto más detalladamente en su libro "El Elogio de la locura" señala que aquellos que meditasen bien sobre lo anterior estarían tentados (sin temor a equivocarse) a buscar en el suicidio consuelo a todos estos pesares.

Erasmo de Rotterdam puntualiza que ya algunos hombres sabios como Diógenes, Xenocrátes, Catón, Casio y Bruto recurrieron al suicidio para apaciguar sus sufrimientos.
Y yo pregunto: ¿sería éste la solución para calmar nuestros malestares?
Las respuestas serán variadas supongo. Mientras tanto, concuerdo con Erasmo de Rotterdam cuando señala que la locura seguirá repartiendo ignorancia por doquier, el atolondramiento y el olvido para los males, dará miel a través de los placeres más superficiales, y congestionará la vida de la humanidad con la esperanza de la dicha y la lujuria.
tar el hilo de ésta ¿qY es que humanos, humanos, la locura nos hace dormitar en cada fragmento de nuestra vida, nos lleva sutilmente hasta el final de nuestra existencia. Y cuando por fin la muerte llega para cortar el hilo de la vida qué pasa?
Nos aferramos a la vida como el náufrago a la marea.
Por ello resulta paradójico observar que aquellas calamidades por las cuales muchos de nosotros estabamos convencidos de la necesidad de morir, son las mismas que nos animan a desear la vida.
Así que sin darnos cuenta, la locura termina convenciéndonos de que la vida, nuestra vida es hermosa, a pesar de todas las calamidades, suplicios y tormentos.
Entonces me digo para mis adentros...¡Locura no me abandones!

2 Comments:

Blogger Andrea said...

Muy bueno jeje, me gustó esto que escribiste... siempre he sentido cierta fascinación por la locura...

En cuanto al suicidio... creo que, como ya decía el buen Sabines, es la única forma de decirlo todo el mismo tiempo..

Ahh! y gracias por visitar mi blog de poesía! debo aceptar que llevo buen tiempo sin meterle nada, pero es porque le he prestado más atención a mi otro blog jeje, en fin...

Felicidades por tu blog!

1/7/06 9:39 p.m.  
Anonymous Anónimo said...

Me agrada tu ante-penúltimo párrafo, ese de "de ahí que resulte... ". Y oye chica, por cierto, debiste darme siquiera un crédito por ser tu modelo para esa fotografía ¿no? !!!!!! (risas)

2/7/06 12:45 a.m.  

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